Los cambios pueden prolongarse entre ocho a 10 años, mientras las deficiencias en el sistema de movilidad van a seguir creciendo, advierten especialistas
Sacar de circulación al modelo hombre-camión, reorganizar los trayectos y otorgar subsidios a los servicios de transporte público son la única solución para dignificar la movilidad colectiva en Puebla. La inaccesibilidad, sobrecupo y rezago en mantenimiento son las principales deficiencias del transporte en la entidad y los retos principales para los usuarios del servicio.
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De acuerdo con el integrante de la coalición Movilidad Segura, Armando Pliego Ishikawa, y el maestro en Hábitat y Equidad Socio Territorial, Zeus Rodrigo Moreno Cortés, las bases de la reconfiguración del sistema de movilidad debe originarse en los primeros días de la administración estatal que va a encabezar Alejandro Armenta Mier, ya que, estimaron, la transición puede prolongarse entre ocho a 10 años. De lo contrario, las deficiencias en el sistema de movilidad van a seguir creciendo.
Según el último reporte del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en 2023, los habitantes de Puebla están insatisfechos con el servicio de transporte. La carencia principal es la insuficiencia de corridas para cubrir la demanda de este sistema, así como que las unidades usadas para brindar el servicio son incómodas.
Además, las unidades del transporte público están sucias y son poco funcionales. Acusaron que los operadores ignoran los reglamentos viales y conducen sin respetar las normas, también que son groseros y maleducados, que se niegan a realizar las paradas en los sitios designados para ello, así como aceptar el descuento para diferentes sectores de la población.
Por si fuera poco, a esto se suma que el titular de la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMT), Omar Álvarez Arronte, reconoció en su último informe de actividades que más de 5 mil de las 17 mil unidades de transporte público en la entidad poblana se encuentran en el límite de su vida útil.
De igual manera admitió que el transporte colectivo no es accesible para personas que viven con alguna discapacidad, pues no hay accesos a nivel de piso para que puedan ingresar. Es decir, que aproximadamente el 15 por ciento de la población en la entidad poblana no puede ejercer su derecho al desplazamiento.
Necesario sustituir esquema hombre-camión
Para Pliego Ishikawa es fundamental que la administración estatal que está a punto de dar inicio asuma un papel protagónico en el sistema de movilidad a través de unidades de transporte colectivo. Apuntó que el gobierno debe dejar a un lado el discurso de la modernización, pues consideró que la petición de los usuarios va más allá de pedir cámaras de monitoreo o conexiones GPS.
Explicó que las verdaderas necesidades de los viajeros son que los operadores manejen respetando los lineamientos viales, servicio confiable y circulación constante de unidades en donde no transcurran más de 15 minutos para ascender a una unidad. Sumando camiones dignos y accesibles.
Para resolver las necesidades, el activista en la materia indicó que se debe cambiar el modelo financiero y de operación. Es decir, dejar atrás el modelo hombre-camión y apostar por un esquema de empresa en donde exista un ordenamiento del gremio y gobernanza para la toma de decisiones. También cambiar el esquema de financiamiento para que los operadores se limiten a conducir y no se vean en la necesidad de cobrar.
“El modelo que tenemos es que se da una concesión por cada unidad y el dueño tiene el derecho de explotarla y lo que hace es poner a un chofer a trabajar, pero para que le salgan las cuentas de sacar la cuota, gasolina y ganancia, ocho horas no le alcanzan, tiene que trabajar de 12 a 15 horas”, dijo.
Apostar por planeación y profesionalización de conductores
En tanto que el maestro en Hábitat y Equidad Socio Territorial, Zeus Rodrigo Moreno Cortés, indicó que para hacer una transformación a largo plazo se deben diseñar diagnósticos para conocer el panorama actual del sistema de movilidad. Entre ellas para conocer el origen-destino de las personas con el objetivo de conocer cómo y de dónde se mueve la población.
Así como un estudio de demanda para identificar los corredores que son susceptibles para intervenir e ingresar algún modelo de transporte. También identificar la frecuencia de las unidades que deben transcurrir, es decir la capacidad para trasladar personas.
El también catedrático de la Universidad Iberoamericana agregó que en la reconfiguración del modelo de transporte público debe estar la profesionalización de los operados para dignificar su labor. Detalló que se tienen que apostar por la sensibilización y educación vial con habilidades distintas que un conductor particular.
“Se les debe dar un conjunto de habilidades y conocimientos especiales sobre conducción señales. Los conductores manejan como manejan porque el modelo financiero les exige hacerlo de esa forma, se tienen que ir pelando el pasaje para sacar su dinero del día porque si ellos no juntan para la gasolina los choferes tienen que poner de su bolsillo”, consideró.
Mientras que el representante de la coalición Movilidad Segura sumó que la administración estatal también debe apoyar con subsidios para financiar la compra o renovación de las unidades, inclusive ser aval para que puedan acceder a créditos.
Por último, los especialistas coincidieron en que es indispensable que la reconfiguración del sistema de transporte avance en el gobierno que está por iniciar con la finalidad de tener los primeros resultados a finales del mandato de Armenta Mier y que en los siguientes años se siga trabajando hasta llegar a su conclusión.