Los productores destinaron menos hectáreas de cultivo a la caña para ocuparlas en la producción de maíz
Izúcar de Matamoros, Pue.— Con una proyección de 50 mil toneladas menos en comparación con el periodo anterior, este viernes arrancó formalmente la Zafra 2024-2025 en la Junta Auxiliar de La Galarza, municipio de Izúcar de Matamoros. A pesar del descenso en la producción, esta actividad cañera se mantiene como un pilar económico fundamental para la región, generando empleo para miles de familias y dejando una derrama económica directa de aproximadamente 3 millones de pesos.
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El evento inaugural contó con la presencia de carreros, choferes, cortadores de caña y productores, quienes desempeñarán un papel clave en esta actividad agrícola. La Galarza, conocida como la junta auxiliar más extensa del municipio, empleará a 250 trabajadores durante esta temporada. Según Mario Morán González, comisariado ejidal, los recursos humanos incluyen 30 carreros con sus respectivas unidades, 10 maquinarias pesadas, dos tractores y el equipo completo del ejido.
Un motor económico para la región
Morán González destacó que la zafra es una de las principales actividades económicas en la región, proporcionando sustento tanto de manera directa como indirecta a miles de personas. Asimismo, señaló que se mantiene una colaboración estrecha con las autoridades auxiliares, estatales y federales para garantizar la seguridad en los tramos carreteros y prevenir incidentes durante el traslado de la caña al ingenio azucarero, ubicado en Atencingo, Chietla.
La importancia de esta labor trasciende generaciones, como lo explicó Lucas Bello, un tractorista de 55 años con más de tres décadas de experiencia. «Reactivar las siembras y mantener vivo este trabajo es un orgullo para mí y mi familia», compartió emocionado. Bello subrayó que el corte de la vara dulce es una tradición que ha sido transmitida de generación en generación en la Mixteca poblana.
Producción estimada y desafíos
Por su parte, Lázaro Félix Bello García, líder cañero de la Unión Local de Productores de Caña de la Confederación Nacional Campesina (ULPCA) en Atencingo, informó que esta zafra abarcará 15 mil 820 hectáreas de cultivo, con una producción proyectada de un millón 621 mil toneladas de caña. Sin embargo, reconoció que esta cifra es menor en comparación con la zafra anterior debido a varios factores.
Entre las causas del descenso, explicó que algunos ejidos y productores optaron por sembrar maíz en lugar de caña, buscando diversificar sus cultivos. Además, algunas plantaciones no alcanzaron la madurez suficiente para el corte, pero se espera que estén listas para el próximo ciclo, lo que podría impulsar la producción en el siguiente periodo.
El líder cañero también informó que la quema de caña está programada para el 24 de noviembre, un día antes del inicio formal de la zafra, establecido para el 25 de noviembre. No obstante, algunas actividades preliminares ya se han puesto en marcha como parte de los preparativos para este importante evento agrícola.
Impacto económico y social
La temporada cañera se extenderá por 176 días, con una fecha estimada de conclusión entre el 15 y el 20 de mayo de 2025. Durante este periodo, se generará empleo para aproximadamente 5 mil personas, entre cortadores, operadores de maquinaria y trabajadores del ingenio azucarero. Además, dejará una derrama económica significativa que beneficiará directamente a los productores y, de manera indirecta, al resto de la región.
“La zafra representa una tradición económica para la Mixteca poblana. Es un motor que impulsa el desarrollo de miles de familias y refuerza la economía local», enfatizó Bello García.
A pesar de los desafíos actuales, como la disminución en la producción y los cambios en los cultivos, la zafra 2024-2025 se perfila como una oportunidad para fortalecer las actividades agrícolas de la región y preservar una tradición que ha sido vital para el sustento de la Mixteca poblana durante décadas.