Mientras esperan apoyo de autoridades, vecinos hacen faenas para recuperar electricidad y agua, proteger el drenaje y abrir caminos para conseguir alimento
Intensas lluvias han provocado en el municipio de Eloxochitlán, localizado en la Sierra Hidalguense, varios derrumbes en cerros que afectaron postes de energía eléctrica, cerraron caminos y, de tanta agua, a punto están de reventar drenajes, según versión de pobladores.
Son tres las comunidades más afectadas: Chalmita, Ticomate e Itztacapa, siendo los vecinos quienes organizan faenas para tener de vuelta los servicios, que además reclaman apoyo a las autoridades municipales y estatales. Sin embargo, afirman, no han sido escuchados.
Ana María, vecina de la comunidad de Chalmita, en entrevista dijo que los daños comenzaron casi con los festejos patrios, cuando un cerro se desgajó y dejó incomunicada a la gente. Aunque de inmediato se hicieron las gestiones ante las autoridades, la ayuda no llegó.
Ante la necesidad de tener servicios básicos los vecinos de varias comunidades se han sumado para poco a poco restablecer los caminos, mientras que el Ayuntamiento solamente les apoya con una maquinaria para remover tierra.
Hasta el pasado miércoles se sabía que los vecinos ya habían logrado regresar el suministro de la red de agua, pero encuentran dificultades para acomodar los postes de luz y por ello continuaban sin energía eléctrica.
La situación es crítica, comenta Ana María, con todo y que familiares que han migrado a Estados Unidos les mandan remesas para comida y herramientas, por lo que la ayuda de los gobiernos municipal y estatal vendrían a reforzar las faenas.
“Desgraciadamente ya están acostumbrados a que, como son los pueblos más lejanos, tienen que hacer las cosas por su propia mano y pues está canijo porque la mayoría ya son adultos mayores. Los jóvenes y adultos se han salido de ahí para buscar trabajo en otros lados”, comenta Ana María.
Agrega que los problemas aumentan porque además de la falta de luz y agua, y de qué drenaje está a punto de reventar, se han complicado los caminos para buscar alimento, pues la comunidad más cercana para abastecerse al menos de la canasta básica está a dos horas de camino, en el municipio de Ixmiquilpan.
Ya poco a poco, en casi dos semanas, la gente ha logrado restablecer servicios, pero lo malo es que la lluvia continúa y podría ocurrir un nuevo derrumbe, por lo que, afirma Ana María, la gente pide ayuda del gobierno.