Con el lema “Cambiar la narrativa” se busca inspirar a que las personas hablen del tema
El Día Mundial de la Prevención del Suicidio se conmemora anualmente el 10 de septiembre con el objetivo de derribar estigmas, mitos y tabúes, para crear conciencia, así como una cultura de comprensión, apoyo y prevención.
Especialistas de la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH), mediante un boletín para la prensa, señalan al suicidio como un problema de salud mental.
En 2023, la mortalidad estatal por suicidio fue de 1.1 defunciones por cada mil habitantes. El 83.3 por ciento (%) de los casos corresponde a hombres y el 16.7% fueron mujeres. Mientras que la mayor tasa de mortalidad por suicidio se presentó en el grupo de edad de 15 a 19 años.
El comportamiento suicida es determinado por diversas causas, entre las que se encuentran los trastornos mentales, principalmente la depresión, problemas de autoestima y trastornos por abuso del alcohol o drogas, violencia, enfermedades crónicas o terminales.
También influyen los problemas económicos y emocionales, o eventos repentinos, como el fallecimiento de algún ser querido, el divorcio o separación de la pareja.
Entre los principales síntomas, especialistas señalan: Sentimientos de desesperanza, con visiones negativas del futuro; conversaciones sobre la muerte de manera reiterada, aun cuando no se esté hablando del tema; amenazas sobre querer hacerse daño o atentar contra su vida.
Este tipo de conductas pueden prevenirse y tratarse mediante intervenciones eficaces, para ello, el apoyo psicosocial del entorno familiar y afectivo dentro de la comunidad es clave.
Como parte de los servicios que ofrece la SSH, se brinda atención integral especializada a pacientes y familiaresa través de los módulos y núcleos de salud mental ubicados en los 84 municipios de la entidad, los Centros Comunitarios de Salud Mental y Adicciones (Cecosama), ubicados en los municipios de Tepeapulco, Ixmiquilpan, Pachuca, Huejutla, San Felipe Orizatlán y Tula o de Villa Ocaranza.